4/7/16

Brexit

Estoy convencido de que en mayor o menor medida todos albergamos la misma sospecha, la misma intuición: La razón de que haya triunfado el Brexit no tiene absolutamente nada que ver con el auge del nacionalismo conservador, ni con la crisis económica global, ni con el miedo al descontrol de los flujos migratorios, ni mucho menos con la pérdida de fe en la Unión Europea. La única razón, por más que lo puedan negar sus defensores, e incluso sus detractores, es por supuesto estrictamente retórica, publicitaria. Si lo prefieren, poética.

Imposible saber ahora que habría pasado si en lugar del Remain, la alternativa al Brexit hubiera sido,  por ejemplo, el Bremain. O incluso, por qué no, el Great Bremain.