25/8/20

Tony

 Qué raro resulta ahora leer El resplandor (no he visto manera de añadir más erres), porque lo coloca a uno automáticamente en el rol de Danny, el crío visionario. No, falso: lo coloca a uno en un lugar totalmente imprevisto por Stephen King: en el papel de Tony, el amigo imaginario del niño, que obviamente no es imaginario en absoluto, y muestra a Danny todo lo malo que va a pasar. Lo ha visto. Como uno ha visto ya tantas veces la película de Kubrik.