5/10/20

Chocolate

El niño sigue a su madre por los pasillos del supermercado gritando en bucle "¡Chocolate, quiero chocolate! ¡Chocolate, quiero chocolate!", y en la cola de caja, el suceso enseguida da pie a dos viejas para entablar conversación. Desde luego, hay que ver, dice una. No deja a la madre tranquila, dice la otra. Y ya sintiéndose respaldada, la primera exclama: ¡Me dan ganas de matarlo! Luego las dos viejas se quedan en silencio meneando la cabeza y mordiéndose los labios de la rabia. Quizá habrían proseguido la charla de no ser porque a una de ellas le llega ya el turno de pagar, y se aleja a paso decidido, deteniéndose solo un instante, el tiempo justo y necesario para añadir a su cesta una tableta de chocolate.

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